¿Que tan fácil es desconectar el Internet de tu país?.
En una medida similar a la tomada hace un par de años atrás por Hosni Mubarak en Egipto y posteriormente en Libia ante las protestas de la población civil, el gobierno de Bashar Al Assad en Siria desconectó completamente de Internet al país de más de 22 millones de habitantes que actualmente está en medio de violentas protestas que piden la salida del actual presidente, quien está en su cargo desde el año 2000 tras la muerte de su padre. No había querido tocar el tema hasta tanto no ver como se desenvolvía el asunto y reaccionaban tanto otros países como la respuesta tecnológica al problema.
Un total de 61 países están en “severo riesgo” de que les corten Internet, si es que llega al gobierno un déspota loco ( o ya está) con esa idea o si se intenta atacar la conectividad de la nación. La cifra la calculó la empresa de monitoreo de redes Renesys, después de lo que ocurrió con Siria, considerando a los países que tienen sólo 1 o 2 empresas proveedoras de conexión internacional.
En este rango caen países como Siria, Túnez, Algeria, Libia, Etiopía, Yemen, Guyana, Uzbekistán, Cuba y otros, marcados en verde bien oscuro. Luego le siguen los que están en un “riesgo significativo”, con menos de 10 proveedores de servicio internacionales, donde en Latinoamérica encontramos a Bolivia, Paraguay y Uruguay.
Los que tienen más de 10 proveedores internacionales, pero menos de 40, tienen un riesgo considerado “bajo”. Aquí aparecen Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, toda Centroamérica y México; mientras que los que tienen más de 40 proveedores, y que son considerados “resistentes” cuentan en sus filas a Brasil y Argentina, además de Estados Unidos, Canadá, Europa, Rusia y Australia.
Tener más de 10 proveedores no es garantía
Desde el punto de vista técnico, al poseer más de 10 proveedores, es más difícil cortar el Internet de un país pero hay otros métodos de controlarlo o por lo menos hacerlo más vulnerable a un corte. Para muchos es bien sabido que controlando los medios y la información se adquiere un gran poder por lo que muchos regímenes se dan a la tarea de socavar las bases para que esto se de libremente, en el caso de los proveedores de Internet, existen muchas maneras y una de ellas es restringirles el acceso a divisas internacionales en el caso de Latinoamérica, las cuales son necesarias para adquirir nuevos equipos y mantener los existentes por lo que se hacen vulnerables a cualquier inconveniente, el síntoma más palpable de esta política es el deterioro de las conexiones o dicho de otra manera, un Internet cada vez más lento o inestable.
¿Cual es la solución?
“La clave a la supervivencia de Internet es la descentralización – y no es uniforme en el mundo. En algunos países, el acceso internacional a los datos y servicios de telecomunicaciones está fuertemente regulado. Puede haber sólo una o dos compañías que tengan licencias para transportar voz y tráfico de internet al mundo exterior, y se les requiere por ley mediar el acceso a todos los demás. Bajo esas circunstancias, es casi trivial para un gobierno emitir una orden que pueda derribar a Internet”, explica Renesys.
Tal centralización, por otro lado, complica la tarea de defender la infraestructura de Internet en caso de un ataque, por ejemplo. La mayoría de los países avanza para diversificar lo más posible su infraestructura, lo que se ve impulsado también por la competencia entre diferentes empresas para ofrecer mejores servicios y precios más baratos.
El análisis de Renesys se centra en la cantidad de empresas que compiten en cada mercado, que no cubre todos los riesgos que existen. Tal vez habría que hacer otro análisis considerando la cantidad de cables de fibra que hay instalados para los diferentes países, y que en Latinoamérica son bastante pocos.
La pregunta es: ¿sientes que en tu país el gobierno hace todo lo posible por que la información fluya o por el contrario sientes que hace lo posible por crear censura, auto censura y controlar los medio?.
¿Cual será el futuro de Internet?.
Por otro lado, el futuro de internet está en manos de los representantes de 200 países y varios grupos que se encontraron en Dubai para discutir sobre las posibles maneras de regular su uso. El debate ha sido muy acalorado en el evento y se intensificará todavía más.
Por un lado, casi todo el mundo del occidente está en contra del control de internet, pero por otro los países más potentes como China y Rusia quieren tener cierto control sobre su uso.
Por un lado, casi todo el mundo del occidente está en contra del control de internet, pero por otro los países más potentes como China y Rusia quieren tener cierto control sobre su uso.
Mientras tanto, todos los países pequeños se sienten atrapados en una guerra de gigantes, aunque ellos también tienen derecho a voto.
Cada país puede realizar un voto en el proceso, poniendo de este modo a las naciones africanas al mismo nivel con los países desarrollados. La cumbre de Dubai ha sido organizada por la ITU, la Unión Internacional de Telecomunicaciones, un organismo de la ONU.
En sí misma, la ITU no tiene ningún poder, pero sirve como un medio para que los demás países puedan negociar los acuerdos. Estos acuerdos controlan cosas como el espectro de radio, las llamadas internacionales y más.
Ahora, los países y las operadoras con representación en la ITU también buscan resoluciones para controlar el internet. Algunas de las ideas son bastante polémicas.
Por ejemplo, algunos piden otorgarle a un solo organismo el control completo sobre el internet. Esto nunca ha sido el caso y muchos afirman que el internet ha sido exitoso precisamente por la gran libertad que hubo.
Asimismo, las operadoras también han propuesto cosas como la implementación de cuotas para que los sitios web paguen el ancho de banda que consumen. Estas compañías afirman que ellas cubren todos los costes para la construcción de las infraestructuras y luego las grandes empresas occidentales llegan y aprovechan todos sus beneficios.
Asimismo, han asegurado que esto mejoraría el acceso a internet para miles de millones de personas, aunque no han dicho nada sobre una rebaja de los precios ni de seguir con el internet libre. Sólo se han centrado en el cobro de los suscriptores y las compañías de internet por el mismo ancho de banda. El sueño de cualquier compañía de telecomunicaciones, un sueño que no tiene nada que ver con la expansión del acceso a internet.
La conferencia tendrá lugar a puertas cerradas hasta el 14 de diciembre. Estados Unidos y Europa ya han mostrado su oposición a las propuestas, pero hay muchos otros votos que podrían influir en los resultados.
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